Venezuela atraviesa una de las crisis económicas más profundas del hemisferio: hiperinflación, devaluación constante del bolívar, sanciones internacionales, y un salario mínimo que apenas supera los 3 USD mensuales. En este contexto, Bitcoin, stablecoins como USDT y Ethereum, se han transformado en herramientas vitales para preservar valor, recibir remesas y realizar transacciones cotidianas.
1. Cripto como refugio en un entorno de hiperinflación
El bolívar ha perdido más del 30 % de su valor trimestralmente y más del 40 % en algunos cálculos privados. Ante esta crisis permanente, los venezolanos recurren a las criptomonedas. Según Chainalysis, para el segundo trimestre de 2024 el uso de BTC, ETH y USDT se disparó un 110 % respecto al año anterior, con un flujo aproximado a 20 000 M USD, equivalente al 20 % del PIB estimado de unos 100 000 M USD.
2. Cantidad de usuarios y adopción masiva
Hoy se estima que 2,9 millones de venezolanos, es decir el 10,3 % de la población, poseen alguna criptomoneda, principalmente Bitcoin. A nivel regional, aproximadamente el 12 % de latinoamericanos tienen activos digitales, lo que representa 57,7 M de personas.
3. Mecanismos principales de uso
a) Stablecoins: protección frente al bolívar
El uso de USDT se ha disparado porque mantiene un valor fijo cercano al dólar, evitando la volatilidad extrema.
b) Gateway para remesas
Alrededor del 30 % de los hogares venezolanos reciben remesas, y el 9 % del total de remesas ingresan vía criptomonedas . Muchas migrantes envían USDT a familias que lo convierten en bolívares localmente sin depender de intermediarios bancarios costosos.
c) Sobrevivencia y proyectos sociales
USD provenientes de criptodonaciones han financiado servicios médicos, defensas legales y ONGs que brindan ayuda comunitaria en cámaras de derechos humanos .
4. ¿Cómo se intercambian en la práctica?
P2P y exchanges regulados
- Binance P2P sigue siendo el principal punto de intercambio, operando con seudónimos que protegen la identidad.
- Otras plataformas también participan, aunque con menor participación relativa, se estima que el 92 ,5 % pasa por exchanges centralizados, según chainalysis.com.
Billeteras y plataformas locales
- Crecimiento notable en servicios nacionales y apps que permiten intercambiar en bolívares o stablecoins con facilidad.
Pagos y compras
- Criptodólares son aceptados en remesas, envíos internacionales y cada vez más en negocios informales (bares, transporte, pequeños comercios).
5. Factores que impulsan esta adopción
- Hiperinflación y devaluación del bolívar
El salario mínimo venezolano equivale a solo unos 3 USD al mes. - Sanciones internacionales
Congelamiento de cuentas, restricciones a bancos internacionales y al sistema SWIFT. - Falta de confianza en el sistema bancario
Bajas tasas de interés, trámites lentos y controles oficiales. - Migración y remesas
Millones de personas fuera del país envían dólares convertidos a cripto por su velocidad y bajo costo . - Apertura regulatoria parcial
A pesar de sanciones, el sistema tolera el uso de cripto, incluso adoptando elasticidades bajo la llamada “Ley Antibloqueo”.
6. Riesgos y desafío
- Volatilidad de Bitcoin: su valor puede variar drásticamente en corto tiempo.
- Fraude y estafas P2P: es necesario operar con cuidado.
- Intervención política: arrestos por especulación cambiaria han sido comunes .
- Liquidez limitada en efectivo: en ciertas zonas, convertir cripto a bolívares puede ser complicado.
Síntesis final
En Venezuela, las criptomonedas ya no son una curiosidad tecnológica: son herramientas de resistencia, supervivencia y reconstrucción económica. Han reemplazado parcialmente al bolívar como reserva de valor, se convierten en un puente para remesas, fondeo social y actividad comercial. Pero también implican riesgos claros: desde volatilidad hasta fraudes y controles estatales. Comprender este entorno es esencial para emprendedores cripto, ONGs y lectores de Latitrends que buscan entender la realidad más allá de los titulares.